lunes, 26 de enero de 2009

Pronto llegará la Fiesta de los Faroles


La Fiesta de los Faroles, una festividad que se celebra el día 15 del primer mes lunar o lo que es lo mismo, la primera noche de luna llena después de la Fiesta de Primavera, que este año fue el 26 de Enero.
En esta fiesta en particular las familias chinas salen a la calle y encienden decenas de linternas de papel y bambú con formas de dragones, animales del horóscopo chino o pájaros, dando vida a un gran espectáculo y por supuesto, hablando de dragones, os encontraréis muchos de estos seres mitológicos danzantes: coloridos, ágiles y vivarachos.

Pero en esta fiesta en particular veréis que el túnel está formado por nueve o doce piezas que están unidas por tela y que tienen un bastón que es sostenido a su vez por los bailarines que llevan también linternas colgantes y entonces, en la noche, mientras ellos mueven unos y otros, os parecerá estar viendo un dragón vivo zigzagueando por las calles.

Pero no solo veremos dragones, no, también disfrutaremos de desfiles de gente caminando con altos zancos y danzas de leones, muchas familias disfrutando e incluso podréis participar de unas cuantas veladas de acertijos. Sí, acertijos. Estos son escritos en papel, se cuelgan en las linternas y quien lo soluciona tiene un premio.

Esta Fiesta de los Faroles se celebra en casi todas las ciudades la misma noche y es un buen momento para disfrutar de la algarabía del pueblo chino y sus comidas típicas. Bueno, no hay fiesta sin comida y en este caso os llenareis de “yuánxiao”, pequeñas bolitas de harina de arroz que se hacen a mano y están rellenas de carne o dulce y cocidas al vapor, hervidas o fritas. Os recomiendo las fritas pues son más crocantes.

Por último, veréis el cielo surcado con coloridos fuegos artificiales y ese será el broche de una las de las fiestas más coloridas y agitadas que se celebran en China.

domingo, 25 de enero de 2009

¡Feliz Fiesta de la Primavera!



La Fiesta de la Primavera o año nuevo chino es el acontecimiento familiar más importante de todos los que se celebran en China. Aquellos que viven lejos de sus hogares vuelven a casa por lo que aeropuertos, estaciones de autobuses y trenes se llenan de gente.

La Fiesta de la primavera empieza el primer día del primer mes del calendario lunar, generalmente los últimos días de enero y principios de febrero del calendario gregoriano, y dura unos quince días. Su origen se remonta a la dinastía Shang (1600 a. C. – 1100 a. C.) cuando al inicio del año, la gente hacía ofrendas a las divinidades del cielo y la tierra y a los antepasados y rezaba para tener buenas cosechas y un buen año.

De todos los días de esta fiesta, la Víspera de la Fiesta de la Primavera es seguramente el momento más importante. Todos los miembros de la familia se reúnen para disfrutar de la deliciosa “cena de la víspera”.

Tras la víspera preliminar, la gente empieza a prepararse para el Año Nuevo. A esto se le llama “viendo venir el Año Nuevo”.

Es un tiempo en que las tiendas están muy ocupadas puesto que la gente sale a comprar lo que necesita para el Año Nuevo, desde aceite comestible, arroz, harina, pollo, pato, pescado y carne hasta fruta, dulces y diferentes tipos de frutos secos. También detalles decorativos, ropa y zapatos nuevos para los niños y regalos para los mayores de la casa, para amigos y otros familiares.

Antes de la llegada del Año Nuevo, la gente se esmera en la limpieza de su casa, tanto por fuera como por dentro, y también lava toda su ropa, las colchas, las sábanas y todos sus utensilios.
Una vez está todo limpio, decoran las habitaciones con varios detalles que confieren a las estancias un aire de fiesta y alegría. En las puertas se cuelgan pares de caracteres chinos negros sobre fondo rojo. El contenido de éstos varía según la casa pero la mayoría son deseos un buen futuro y buena suerte para el año entrante. También se cuelgan fotos de los dioses de las puertas y de la riqueza para mantener alejados a los espíritus malignos y dar la bienvenida a la paz y a la abundancia.

La gente presta mucha atención a la víspera de la Fiesta de la Primavera. Ese día, todos los miembros de la familia se reúnen y cenan juntos. La comida es más abundante y diferente a la del día a día. Los platos con pollo, pescado y doufu nunca faltan porque sus pronunciaciones significan respectivamente buen augurio, abundancia y riqueza. Tras la cena, los miembros de la familia se sientan juntos, hablan y miran la televisión.

En el pasado, los fuegos artificiales y los petardos eran muy populares durante la Fiesta de la Primavera. La gente creía que el chisporreteo ayudaría a alejar los malos espíritus. Sin embargo, esta actividad fue prohibida en las grandes ciudades ya que el gobierno consideró que suponía un gran riesgo para la seguridad y una fuente de contaminación.

El ambiente de fiesta no sólo se encuentra en los hogares sino también en las calles. Durante estos días, se celebran muchos tipos de danza como la del dragón, la de las linternas, las fiestas de los faroles y las ferias en los templos. La Fiesta de la Primavera se acaba cuando llega la Fiesta de los Faroles.

viernes, 23 de enero de 2009

FELIZ AÑO NUEVO CHINO

El Festival del Año Nuevo chino es una de las fiestas más significativas para el pueblo chino en todo el mundo, indistintamente del origen de sus antepasados. También es conocido como el Festival del Año Nuevo Lunar debido a que está basado en el calendario lunar, en vez del calendario gregoriano. La fiesta es una ocasión muy jubilosa debido principalmente a que es el tiempo en que la gente se libra del trabajo para reunirse con la familia y los amigos.

El origen del Festival del Año Nuevo chino puede ser remontado a miles de años a través de una serie de coloridas leyendas y tradiciones que evolucionan continuamente. Una de las leyendas más famosas es la de Nien, una bestia extremadamente cruel y feroz, que según la creencia de los chinos, comía personas en la víspera del Año Nuevo. Para mantener a Nien lejos, se pegaban coplas en papel rojo en las puertas, se iluminaba con antorchas y se encendían petardos durante toda la noche; ya que se dice que Nien temía el color rojo, la luz del fuego y los ruidos muy fuertes. A inicios de la mañana siguiente, al impregnarse el aire con los sentimientos de triunfo y renovación por haber mantenido alejado a Nien por otro año, el saludo más popularmente escuchado era kung-hsi o "felicitaciones".

Aunque las celebraciones del Año Nuevo chino generalmente duran solamente varios días, a partir de la Víspera del Año Nuevo, el festival en sí dura en realidad unas tres semanas. Se inicia en el día veinticuatro del duodécimo mes lunar. Se cree que en ese día, varios dioses ascienden al Cielo para presentar sus respetos e informar acerca de los asuntos hogareños al Emperador de Jade, la deidad suprema del taoísmo. Según la tradición, las familias honran esos dioses quemando papel moneda para uso ritual para pagar sus gastos de viaje. Otro ritual consiste en embarrar azúcar de malta en los labios del Dios de la Cocina, una de las deidades que viajan, para asegurar que él presente un informe favorable al Emperador de Jade o mantenga el silencio.
Seguidamente, se cuelgan "coplas de primavera" alrededor de la casa. Las coplas de primavera son rollos y cuadros de papel escritos con bendiciones y palabras de buen augurio, tales como "buena suerte", "riqueza", "longevidad" y "tiempo de primavera". Los cuadros de papel son generalmente pegados al revés, debido a que la letra equivalente en mandarín para "al revés", tao, es homófona con la palabra "llegada". Así, los cuadros de papel representan la "llegada" de la primavera y el "arribo" de tiempos más prósperos.
En la Víspera del Año Nuevo, los miembros de la familia que ya no viven en la casa hacen un esfuerzo especial para retornar al hogar para una reunión y compartir una suntuosa comida. En ese momento, los miembros de la familia entregan "dinero de buena suerte" en sobres rojos a los ancianos y niños, y se quedan despiertos durante toda la noche para darle la bienvenida al Año Nuevo. El pueblo chino ha creído por mucho tiempo que permanecer despierto durante toda la noche de la Víspera del Año Nuevo ayuda a que sus padres tengan una vida más larga. Así, se mantienen encendidas las luces durante toda la noche no sólo para alejar a Nien, como en los tiempos antiguos sino también como una excusa para mantener a la mayor parte de la familia reunida. Algunas familias incluso realizan ceremonias religiosas después de la medianoche para darle la bienvenida al Dios del Año Nuevo a sus hogares, un ritual que generalmente termina con una enorme ronda de petardos.

Lo primero que se hace en el Día del Año Nuevo es el ritual para rendir homenaje a los antepasados. Después, se veneran a los dioses, seguido por un acto donde los miembros más jóvenes de la familia presentan sus respetos a los mayores que todavía viven. La gente se pone vestidos nuevos y visita a los amigos, vecinos y familiares para intercambiar buenos deseos de kung-hsi fa-tsai , que significa "felicitaciones y prosperidad". Es un momento para la reconciliación, donde se dejan aparte los rencores del pasado en medio de la atmósfera amistosa y llena de calor humano.
Unas de las vistas más espectaculares durante el Festival del Año Nuevo chino son las danzas del dragón y del león. Las cabezas de esas temibles bestias supuestamente ahuyentan el mal, y los ágiles movimientos de los danzantes ofrecen un gran espectáculo para deleite de todos.
El segundo día del Festival del Año Nuevo chino es el día en que las hijas casadas retornan al hogar de sus padres. Si ella es una recién casada, su marido la debe acompañar y llevar regalos para su familia. Según una encantadora leyenda, el tercer día del Año Nuevo es el día en que los ratones casan a sus hijas. Por eso, durante esa noche, se supone que la gente debe acostarse temprano para que los ratones puedan llevar a cabo sus ceremonias de matrimonio.

En el cuarto día, el fervor comienza a disiparse. En la tarde, la gente prepara ofrendas de comida para recibir el retorno del Dios de la Cocina y su séquito de su viaje a la corte del Emperador de Jade. El retorno del Dios de la Cocina significa el fin de la libertad de la supervisión espiritual, por eso un popular refrán chino dice: "Nunca es muy temprano para despedir a los dioses ni es muy tarde para invitarlos a que retornen".

El quinto día pone fin a las festividades del Año Nuevo chino. Se quitan todas las ofrendas de los altares y la vida retorna a la normalidad. Finalmente, en el noveno día, se presentan numerosas ofrendas en el atrio o patio de los templos para celebrar el cumpleaños del Emperador del Jade, que según la creencia popular, nació inmediatamente después de la medianoche del noveno día.
Como en todas las festividades chinas, la comida juega un papel importante durante todo el Año Nuevo chino, y las cenas tienden a ser especialmente suntuosas. Muchos de los platos que se preparan para esta ocasión se sirven debido a que son considerados como símbolos de buena suerte. Por ejemplo, el pescado (yu) representa "abundancia"; la cebollina (chiu-tsai) significa "eternidad"; los nabos (tsai-tou) simbolizan "buen augurio"; mientras que las bolas de pescado (yu-wan) y de carne (jou-wan) representan "reunión". También se preparan bocadillos auspiciosos para la ocasión, tales como el pudín de arroz glutinoso (nien-kao), para desearle a la gente que "avance hacia cargos más altos". La gente del norte de China generalmente prepara empanadillas (shui-chiao) que tienen la forma de lingotes de oro y supuestamente ayudan a quienes las coman a tener riqueza.

Sin embargo, el festival del Año Nuevo chino no es solamente diversión a gusto, y ciertos tabúes y supersticiones de la temporada nunca han perdido su poder persuasivo. Por ejemplo, la gente cree que barrer el piso durante los primeros cinco días del Año Nuevo Lunar es de mala suerte, debido a que uno puede accidentalmente barrer la buena suerte y riqueza de uno fuera de casa. También se prohibe severamente el lenguaje malo y hablar de la muerte. Si se rompe un plato, es vital decir tan pronto como sea posible "sui sui ping an," que significa "paz a través del año". Hay que mantener encendidas las barras de incienso y las velas de los altares día y noche para promover la longevidad; y algunas familias esconden los cuchillos y las tijeras para evitar que uno accidentalmente corte el "hilo de la buena suerte" en el año que viene.

Algunos de esos rituales y supersticiones tienen una connotación espiritual, y por lo general, todos los templos de Taiwan se encuentran ocupados en esta época del año ya que grandes multitudes acuden a ellos para quemar incienso y orar por buena suerte. De hecho, algunos de los templos más importantes cierran sus puertas antes de la medianoche en la Víspera del Año Nuevo a medida que la ruidosa e ilusionada muchedumbre se congrega afuera. Al tocar la medianoche, las puertas se abren de par en par y la gente se desplaza al frente en un intento por ser el primero en colocar su incienso en el incensario, ya que otra vieja tradición dice que la primera persona será bendecida con buena suerte para todo el año venidero.

Así, varios días antes de la Víspera del Año Nuevo chino, la gente que vive lejos de sus familias comienza a prepararse para viajar a casa. En un intento por evitar los embotellamientos de tráfico, muchos comienzan el recorrido el día anterior. Aquéllos que dependen del transporte público generalmente acampan en bolsas de dormir en los aeropuertos, estaciones de tren y terminales de buses para asegurarse de obtener las reservaciones de la fecha en que viajarán, y los boletos usualmente desaparecen al momento que son puestos a la venta. Los trenes, buses y aviones están siempre llenos. No importa cuán pesada sea la jornada, se considera que vale la pena soportar todas las inconveniencias una vez que la familia se encuentre reunida en la mesa para la cena del Año Nuevo Lunar, la comida más importante del año. En efecto, no importa cuáles sean los cambios a través del tiempo, la noción de reunirse con la familia siempre se encuentra en el centro de las celebraciones del Año Nuevo chino.

domingo, 11 de enero de 2009

2009: Año 4707, Año del Buey


El 2009, considerado por los chinos como el año del "buey de tierra", será de reflexión sobre temas de responsabilidad, para arreglar asuntos domésticos y poner la casa en orden. El año nuevo chino comienza a partir de la primera Luna nueva de primavera (la segunda después del solsticio de invierno), por ello el país asiático celebrará su entrada el próximo 26 de enero.

La entrada del año nuevo chino, para la cultura milenaria será el año 4707 y a fin de alejar la mala suerte y dar la bienvenida al nuevo ciclo, se encienden cohetes, veneran a sus deidades y bendicen a sus ancestros antes de salir de casa. Tras hacer una serie de vaticinios para cada signo zodiacal chino, el libro señala que el "año del buey" corresponde al elemento tierra, tanto de manera fija como variable. "Es la segunda de las 12 ramas terrestres, en chino se llama `chou' y simboliza honestidad, rectitud, sinceridad y realismo", precisan los autores al indicar que dicho animal para el pueblo oriental se caracteriza por ser un signo tenaz, con muchas reservas de energía y siempre dispuesto al trabajo.
Dado lo anterior, vaticinan los también especialistas en "feng shui" y la metafísica china, 2009 será un año que va a registrarse por la tenacidad, perseverancia y búsqueda de la estabilidad.